CLI

Esa otra ciudad

Nos separa el negro asfalto,
las venas de esta ciudad viva
que duerme en la noche
bajo la luz roja de los semáforos,
el azul de los balcones yertos
y el maullido de un gato,
como yo, callejero.

La luna, en su corvo caminar
raya el cielo oscuro
con su navaja de marfil,
haciéndole sangrar nostalgias
en forma de nubes naranjas,
el insomnio vuelve otra noche más
para acompañarme mientras tú
al otro lado de la ciudad, dormida,
ignoras mi deseo de que estés
abrazada a mi cuerpo, agotado y sudoroso,
tras el combate tembloroso de la carne.

Pero amanece poco a poco,
el sol limpia las calles de sombras y besos furtivos
dados en los rincones del olvido,
clarea el cielo como las canas del viejo
que sabe demasiado y espera poco de la vida.

La ciudad se despereza
y yo me duermo oyendo de fondo
el azaroso litigio
de los que desconocen esa otra ciudad.

@LexCarn
Alejandro Carmona

CL

Reflexiones de madrugada

Tú eres belleza efímera y carnal

gota de rocío que muere en la mañana

con los virginales rayos del sol.

¿Y qué soy yo?

Yo soy la sombra eterna

de la errante deformidad de la soberbia

que se alimenta de las tinieblas de la noche.

Soy el teatro abandonado de mi propia vida,

casi derruido, con el telón hecho jirones

y butacas mohosas, como mi cuerpo

habitado por el vacío de la nada

que se contenta con acabar

con botellas de whisky, difuminarse

en el humo del tabaco y morir de placer

en otros cuerpos desconocidos,

no es vicio, es soledad marchita,

como esas películas en blanco y negro

sin un final feliz.

@LexCarn

Alejandro Carmona

CXLIX

Condenado a ser un hombre

Atrapado en un bucle espacio-tiempo

en una época que no me pertenece

me hallo yo (en soledad),

un alma de vida nocturna,

un corazón que añora siglos pasados,

que vive en un mundo de sueños de papel

y versos perdidos, un romántico caduco

con el honor como divisa.

Repitiendo mi vida una y otra vez

siglo tras siglo, como castigo,

cansado de mi terrible maldición

me encuentro en este extraño tiempo

de fronteras levantadas con urnas,

petróleo del color de la sangre como moneda,

guerras de codicia y voces sepultadas,

este insólito tiempo de la era del ser humano.

Aún recuerdo cuando era tan solo un ánima

y trataba de encerrar la belleza,entre mis manos,

aferrarme a ella y sentir el clímax de lo divino,

siendo esta caprichosa, tomando forma de mujer

y cambiando su nombre por el tuyo,

acabé condenándome a ser un hombre.

@LexCarn
Alejandro Carmona

CXLVIII

Semanario

Este lunes tan
miércoles sombrío
que sueña ser viernes
en la noche,
ardiendo en deseos
de amanecer domingo
entre tus caderas.
Esos martes que duran
hasta el jueves
hablando del pecado
de los sábados de pasión.

@LexCarn
Alejandro Carmona

CXLVII

Jugarme la vida

Otra calada,

otro sorbo,

otra raya.

Me desprendo

de la ruina montañosa

de lo que tú llamas amor

y para mi, son vicios

por devoción.

Jugarme la vida

en el borde mentiroso

de un precipicio de cristal

para beber el whisky barato

que destila brioso la perdición

del arco de tus piernas.

@LexCarn

Alejandro Carmona

CXLVI

Ella dijo

Ella dijo quédate,

y yo huí

como un pájaro

buscando libertad

para acabar volando

prisionero de su recuerdo,

ahora solo hay guitarras, sin clave de sol,

como este perdedor de amaneceres sin luz

condenado al humo de un cigarro perturbador.

Difícil es el castigo

de tener que vivir con la culpa

de que fui yo quien nos condenó

a ser tan solo amigos,

es como soportar el peso del mundo

sobre mis hombros afligidos.

Subsistiré sin atarme

a la locura de tu albedrío,

como ves, gata de ojos negros,

el alma del poeta no tiene cura.

@LexCarn

Alejandro Carmona

CXLV

Llueve en la ciudad

De un cielo gris perlado
cae gota a gota el agua,
que como los recuerdos
de aquellas noches de otros inviernos
se difuminan al igual que la niebla
que cubría la vieja casa azul,
hoy abandonada, sin un corazón que la habite,
y sin unas caricias que la recorran.

Las calles se llenan de huellas perecederas
de unos pasos anónimos
que se esconden tras un paraguas
y que, como el tiempo y las oportunidades,
pasan para no volver y caer
en la amnesia de las aceras.

Esta fina capa sobre los tejados
huele a nostalgia y sabe a tu piel,
cada charco es como un verso suelto
del poema incompleto del mar,
hoy llueve en la ciudad
como lleva haciéndolo hace tiempo
en cada recoveco de mi ser.

@LexCarn
Alejandro Carmona

CXLIV

Noche oscura

La noche oscura se resquebraja

y la luz entra por las grietas,

muero poco a poco

en tus recuerdos y dejo de existir

en tu veleidoso corazón,

mi insomnio es fiel compañera

en la acidular melancolía

que me arropa con sus negros brazos

y me canta tristes canciones

con su gélido aliento;

la noche es el purgatorio,

mi condena terrenal,

el signo de Caín, que me recuerda

que mi corazón solo bombea sangre,

que mi alma es un juguete roto

y que el amor es un invento

de algún poeta soñador loco.

@LexCarn

Alejandro Carmona

CXLIII

Indiferente

Por el camino perdí

mi corazón y mi alma,

mis recuerdos y mi aprendizaje,

quedando solamente yo

poca cosa como ves,

un cuerpo inerte,

un muerto viviente

con heridas sangrantes

y dolientes,

que no conocen cura alguna

salvo tu piel suave

y caliente,

mas como siempre

tú, indiferente.

@LexCarn

Alejandro Carmona

CXLII

Sencillamente no puedo

Sencillamente no puedo...
se entremezclan mis sentimientos
y soy derrotado nuevamente
por mi peor enemigo (yo mismo),
estando ya vencido
me he dejado llevar,
me ha derrotado la debilidad de la carne
la cual se muere lentamente,
me ha demolido la arena del tiempo
que cae implacable e incesante,
me ha dejado exhausto este mundo
que gira con mirada impasible
a pesar de lo que en él ocurre;
puede que algún día
me deje de nuevo llevar
por la corriente de la vida,
y que me arrastre esperanzado
a una nueva orilla,
pero por hoy...

Sencillamente no puedo...

@LexCarn
Alejandro Carmona

CXLI

De que me vale

De que me sirve...

de que me vale...

si apenas ya me reconozco,

ni siquiera me recuerdo

y sin embargo, el olvido que soy

aquí de pie sigue,

muriendo en el pasado,

viviendo del futuro,

buscando un presente...

@LexCarn

Alejandro Carmona

CXL

Mundo virtual

Te abro con suavidad,

veo ilusionado cómo te enciendes

y como siempre brillas,

haces sonidos extraños,

me pides contraseña

para que continúe,

más de tus sonidos extraños,

de repente no tenemos conexión,

coges un virus, me preocupo.

¡Pantallazo azul!

Me desespero, te apago,

me voy enfadado,

no hay quién os entienda.

Me vuelvo a ese hilarante mundo

que existe más allá del Windows.

@LexCarn

Alejandro Carmona

CXXXIX

Súbditos

Aún sientes la rabia,
la furia que te corroe
día tras día por dentro;
no te deja dormir,
pensar, respirar, sentir,
no te deja vivir;
ha inundado cada rincón
de tu alma, ahora,
le perteneces...

                        eres un súbdito más del odio.

@LexCarn

Alejandro Carmona

CXXXVIII

Pétalos de tiempo

Que es para mi el tiempo

si no pétalos marchitos

de la rosa de la vida,

que caen lentamente

sobre esta tierra inquina.

Y yo, cual incauto

por aferrarme a ella

me clavé su espina,

desangrándome gota a gota,

sobre el frío mármol

de la muerte.

@LexCarn

Alejandro Carmona

CXXXVII

Universo de la nada

¿Quién ordena caer incesantes

a las agujas del reloj?

¿Por qué vivimos corriendo

y siempre vamos tarde?

¿Cómo es posible que no seamos

capaces de controlarlo?

Todo está en movimiento,

las nubes, los coches,

nuestros sueños, las lágrimas,

la risa, la luz, la oscuridad,

la vida y la muerte;

¡Quieto!

Detente por un instante,

en este mundo, que navega

preso de sí en el universo,

dibujando un pirueta cual vencejo

en la negrura del espacio,

y que al igual que tú

se dirige a ninguna parte.

Siente el tiempo...

La nada...

@LexCarn

Alejandro Carmona

CXXXVI

Mar de recuerdo

Lejos del horizonte tornasolado
paseando por la orilla de la memoria,
sintiéndote humedecer mis pies,
intento vanamente asirte entre mis manos,
pero te escurres entre mis dedos
y solo queda arena mojada,
nada, ni siquiera la espuma de ti quedó,
y el mar ya tan solo es un recuerdo.

El tiempo ha dejado su huella
en el troquelado de mi piel,
me ha hecho olvidar sueños,
ha arrebatado la luz a mis ojos,
alegría y fuerza a mi viejo corazón,
y sin embargo, atrás dejé el áspero resentimiento,
de este solo mi sombra de terciopelo azul queda.

Extraña luz blanquecina la de la luna
que ilumina tristemente los escombros de mi ego,
me derrumbé por la grietas de mi codicia, y mis pilares cayeron.

Ensordecedor silencio acompañó a mi caída
y quedé esparcido en el solar de mi alma rota,
a la intemperie, al frío aire de la noche de nuestras desilusiones.

Tendré que retirar mis pedazos y volver a empezar,
enterrando mi ruina bajo los pétreos versos más apasionados
que jamás se atrevió a escribir ningún mortal
para no obstante morir solo, apretando mis puños
intentando recordar como era el mar.

@LexCarn
Alejandro Carmona

CXXXV

Cicatriz

He perdido mi rumbo en los distintos

senderos que se entrecruzan en el mundo,

desorientado por el ruido y el humo,

mareado por el whisky y las coristas,

miré una vez más la cicatriz

y me volví a preguntar lo mismo

¿Dónde estará la brújula

que me muestre el camino

y me lleve hasta ti?

Esto no es más que un sueño certero

del que al despertar, me hallo rodeado de soledad,

ella es la que va llenado mi alma,

día tras día, trago a trago,

el destino tenía razón cuando me dijo:

“La soledad siempre te acompañará

hasta el día de tu muerte, en el que te dejará

y el silencio ocupará su lugar”.

A pesar de todo, me refugio en los renglones

del latir de un sentimiento abandonado,

su único consuelo contar lo vivido,

de estas lindes ya soy un poeta versado

que escribe no del amor, sino del olvido...

Del olvido que me profesas...

del olvido que yo quisiera para ti,

pero siempre recordará tu presencia

la cicatriz que marca mi existencia...

@LexCarn

Alejandro Carmona

CXXXIV

Sombras en el reloj

Sombras que marcan el ritmo de la vida,

el vaivén de las horas que bailan en el reloj,

oír palabras en los signos mudos de nuestras manos

e interpretar silencios que gritan;

pasar la noche a la luz de una mente,

sostener entre mis manos libros de textos

con enseñanzas muertas, escritas con tinta viva

que dibujan nuevos horizontes en las paredes

blancas del tedio, un flexo como testigo ciego

y un té aún humeante,

amanece y mi mundo muere.

@LexCarn

Alejandro Carmona

CXXXIII

Testigo de mi propia vida

¿Quién soy yo para atreverme
rectilíneos ringleros escribir,
en los que pueda verme
suspirando, del deseo de vivir?

¿Qué puedo hacer más que imaginar
un mundo hecho a mi medida?
Por el cual con distinguido deambular
ser testigo de mi día a día.

Yo también he caído, lo admito
en la basura de esta
telerrealidad llamada vida.

@LexCarn
Alejandro Carmona

CXXXII

El rumor del viento

En la soledad de la noche

se oye el rumor del viento

que parece decir tu nombre,

una y otra vez,

entre susurros espectrales.

Aquí alejado del bullicio

intento escapar del maleficio

de tu recuerdo

dulce como la miel al principio,

amargo como la hiel al final,

onírico amor vivido

por el poeta entre sus sonetos,

dolor experimentado

ante la realidad de la vida.

¿Por qué prometer

sin llegar a dar?

¿Por qué tener esperanza

para luego desesperar?

La respuesta solo la tiene

el corazón, que no piensa,

únicamente siente,

sin poner condiciones.

@LexCarn

Alejandro Carmona

CXXXI

Seguiré caminando

Por un camino empedrado

cabizbajo voy caminando,

sombras atrás voy dejando,

que errores y aciertos son,

el reflejo de mi ser

en el espejo estoy buscando

pero hasta el día 

en que no abra mi corazón

sólo seguiré caminando.

No sabré quien soy

hasta que te encuentre,

no sabré que decirte

hasta que te tenga de frente,

lo que si sé con certeza,

es que te estoy buscando

y hasta que no te halle,

como un ermitaño

por la montaña de la vida,

sólo seguiré caminando.

@LexCarn

Alejandro Carmona

CXXX

Imperfección

Soy un poeta imperfecto,
unas veces escribo versos
cargados de mareas de emociones
y otras, me parecen obras
de un ladino trovador
de laúd en mano,
que canta orgulloso
anodinas tonterías.

En este momento sin inspiración,
escribo mi frustración,
como cuaderno de bitácora
ante un papel en blanco
donde me entra pánico, pavor,
ya no me queda nada que contar,
ahora, desde la orilla de la nada
es tiempo de pensar y mirar el mar.

@LexCarn

Alejandro Carmona

CXXIX

Por no saber decir

Miro el mar en el que una vez te bañaste,

por si sus aguas aún guardan tu reflejo

como un tesoro marino,

hogaño navego sus bravas aguas

en un velero que no va a ningún puerto,

yo soy su capitán y conmigo este barco

hacía su deriva va,

a veces, en la soledad del mar

oigo que me llamas, mas no es posible,

la locura me embarga,

el viento me trae recuerdos de antaño,

cuando estabas junto a mi

pirata era, ahora que no estás

soy un marinero en tierra,

que surca un mar imaginario.

No soy más que un viejo marino

que una vez se propuso singlar el mundo entero

perdiendo su mayor tesoro, por no saber decir...

te quiero.

@LexCarn

Alejandro Carmona

CXXVIII

Kamikaze

Vivo a volantazos perdiendo el control a sabiendas,

derrapando en el abrupto asfalto del tiempo

y chocando contra el obstáculo de la razón,

el motivo es que no me conformo con lo aparente

y me gusta conducirme en sentido contrario,

soy un kamikaze convencido, un idiota equivocado.

Huyo del martirio que me someten los que afirman,

que es imposible, que estoy loco, que no se puede

besar con los ojos, mirar con la boca,

tocar con los oidos, oír con las manos

y oler con el corazón, me da en la nariz,

que ellos no sienten como lo hago yo,

debería de ser menos original y más clásico

pero no te conocen a ti ni lo que me provocas...

No saben del lenguaje de un alma diferente, 

que se entretiene envidiando a la naturaleza

y sus flores, que desea ser espuma de mar

de las olas de tu melena, nadie entiende lo que...

Está detrás de cada mirada,

en la sombra de unos ojos,

de unos labios que se muerden,

de un nudo en la garganta,

en el calor de la piel,

en los pelos que se erizan,

de un puño que aprieta

en la nada todo lo que

quisiera...

Llámalo deseo

@LexCarn

Alejandro Carmona

CXXVII

Dónde nadie me ve

¿Estamos preparados para reconocer la belleza?
Me lo suelo preguntar con frecuencia
y no tengo una respuesta, sólo la propia.

Para mi, la belleza surge en una dimensión espejo,
un mundo exactamente igual que el material
pero sus leyes son distintas y no afectan
a este mundo dormido e inconsciente.

Nace en las almas, tras una herida que no tiene
carne que cicatrizar y se desangra en emociones
y un dolor que no tiene cura.

Es mi visión, en la que me siento como un hechicero
vigilante, entre estos dos mundos de los cuales
a ninguno pertenezco y dónde nadie me ve.

@LexCarn
Alejandro Carmona

CXXVI

Autobiografía

Soy muy de saltar en paracaídas sin paracaídas

o de hacer puenting sin cuerda, me lanzo

y siempre acabo en un monumental tortazo,

esa es mi forma de ser en la vida, antes

no me importaban las heridas, las llevaba bien,

me acostumbré al dolor o al menos no conocía otra cosa

y me indicaba de que seguía vivo, será cosa de la edad

pero ya no las soporto como antes o quizá

ha llegado el momento de curarlas, de ver

de otro modo mi vida, ya no me vale lo de antes.

Y con eso me refiero al miedo

de no ser una buena persona,

a fallar a quienes me querían,

a estropearlo todo, miedo sí,

ese que se disfraza con malas caras,

y te hace hacer justo todo aquello que no querías,

y cuando lo superas y dejas atrás

todas las inseguridades,

ya no queda nadie a tu lado,

debes soportar el precio,

pero aún te queda el calor que sientes

por esa persona especial que siempre existe

aunque guardes silencio.

Ya no me consuelan los poemas,

ni las canciones de cuatro minutos y medio,

ni las copas, sólo desconecto

al abrigo de la luz de la luna,

al rodar por la carretera

o mirando el mar, me he dado

cuenta que la cura a todos mis males

es lo bello y cálido de la vida,

lo sencillo y con autenticidad.

Tan fácil y difícil de encontrar,

cómo ponerle rejas al cielo,

darle bordes al mar, o planear

al viento como una gaviota,

hacía el infinito de una puesta del sol.

@LexCarn

Alejandro Carmona

CXXV

Cometa al viento

Por momentos siento una losa invisible

que me aplasta y en otros sería capaz de volar libre

a donde quisiera, supongo que ese es mi precio a pagar,

en monedas acuñadas de melancolía,

por tener esta sensibilidad que me acompaña

y que me hace ver otros mundos paralelos,

también como otra moneda cualquiera

tiene su cruz y se manifiesta en mis enfados

que nadie entiende, en mis errores, en mi orgullo

y en la vergüenza de tener que reconocerlos.

Me doy cuenta de que soy una cometa

a merced de a donde soplen los sentimientos

y algunas veces te estrellan contra el suelo,

también soy quien maneja, poco hábil,

la cometa y la recompone, y nadie puede soportar

ser tantas cosas a la vez, tener tantas caras distintas.

Supongo que algún día se romperá la cuerda

y dejaré de manejar parte de lo que soy

y volaré libre sobre el mar, imagino, mientras

mi otro yo se queda atrás en la tierra

mirando como vuelo.

@LexCarn

Alejandro Carmona

CXXIV

Primer recuerdo

A veces me gusta viajar en mi memoria
adentrarme en ese agujero de gusano
por un segundo que dura toda mi vida,
el recorrido es hacia atrás en el tiempo,
rememorando los buenos momentos y las risas,
también los malos y sus enseñanzas,
pero me agrada más evocar las primeras veces,
cómo cuando conocí a alguien,
la primera vez que miré esos ojos
que me dejan sin habla o que me fijé en su boca.

Ir retrocediendo más aún y ver la primera copa,
el primer beso, "la primera vez" donde dejaste la niñez,
la primera ruptura.

Pero, no todo es bueno, me encuentro de bruces
también con pérdidas, el dolor que me provocaron,
los ausentes, las veces que perdí, las que me rompí
y las que fingí ser fuerte.

El viaje es largo y todavía incompleto,
queda mucho espacio en blanco por vivir
pero su final siempre es el mismo,
el primer recuerdo,
el de un bebé gateando en busca de su madre.

La vida es una película vista del revés
y disfrutaré de la mía hasta esa primera última vez
en que inicie mi partida a las estrellas,
con ese hermoso recuerdo y siendo de nuevo,
ese bebé gateando en busca de su madre.

@LexCarn
Alejandro Carmona

CXXIII

Reciclaje

Soy un contenedor,

un simple y gris contenedor de reciclaje,

mi PVC es de huesos, carne y sangre,

en mi caen los residuos del día a día,

momentos cotidianos, gestos,

escenas vividas u observadas.

Todo pasa por la planta de reciclaje

enclavada en mi cerebro, lo proceso

y mis manos convierten los deshechos

en poemas de reciclados sentimientos.

No todo es reutilizable y algo se queda

pegado al fondo, y huelo a podrido por dentro

pero cumplo con mi misión.

Hasta el día en que sea inservible

y me sustituyan por otro,

y quede varado en un vertedero de cemento

ya para siempre, como ahora, vacío.

@LexCarn

Alejandro Carmona

CXXII

Oasis de lo bello

En mis inmensas disputas internas del alma

tú eres un destello intenso,

basta verte un segundo para convencerme

que a pesar de creer cada vez menos en las personas,

en los dioses, en la ideas, en la filosofía y la moral que a todos atan,

me vale tu sola imagen para ser libre y creer cada vez más en ti.

Esta iluminación no es gratis,

todo tiene un precio y aún manteniendo mi negativa

a dejarme llevar, a querer alejarme, hacerte ver lo idiota que soy

o que no valgo la pena, me arrojas a vivir sin pretenderlo.

En este mundo donde se valora

más la imagen que se deshace como ceniza al viento,

donde ya no se alzan voces por utopías,

donde ya nadie se arriesga a coger flores,

donde surgen a cada paso maestros del esto y del aquello,

de locos ya sin molinos y donde todos corren sin destino,

en un mundo en el que manda el reloj y lo fingido,

tú eres mi pequeño oasis, de lo sencillo y bello.

@LexCarn

Alejandro Carmona