miércoles, 28 de marzo de 2012

XLI

Del binomio de la vida y la muerte
somos participes, la una nos da
el frágil aliento de conocer la belleza
y la otra nos lo arrebata con sus manos
huesudas y húmedas para llevarnos
junto a Hades en el averno;
podemos caer cómo aquellos
los sempiternos dioses de piedra,
madera, mármol o bronce, los cuales
se desploman y rompen para desaparecer;
podemos caer también nosotros
cómo lo que somos, seres mortales,
carne y hueso, de generación en generación
renacida bajo el reinante orbe celestial
,
nos derrumbamos también nosotros
a morder el polvo del que venimos
pero nuestra carne muestra su rebeldía
e intenta levantarse, aquellos que lo consiguen
son los llamados héroes inmortales

de los que sus hazañas perduran a través
del tiempo inspirando al mundo;
no esperéis de mi tal heroicidad,
sólo soy un pirata sin honor,
sin mar que surcar, sin barco ni bandera,
sólo espero la muerte del corsario

entre vasos de ron.

A. Carmona


viernes, 23 de marzo de 2012

XL

¿Qué dios pudo trazar mi destino?
¿Qué mano inmortal decidió por mi?
¿Quién se atrevió a crearme de la nada
para darme formas humanas?
Me pregunto del alumbramiento de mi alma
y de su vacío, si alguna vez valió la pena
nada queda de aquello, salvo una porción de luz,
una lágrima que reservo para el final

¿Cómo he podido perderme a mi mismo?
He vendido mi ser por pedazos al peor
postor, el fragmento que queda lo protejo,
lo guardo para mi, no me atrevo a jugármelo,
quédate con mi cuerpo no me importa
lo que hagas de él, pero déjame conservar
para mi lo poco que me queda, el resquicio
de lo que fui un día, déjame confundirme
entre las sombras de la noche y guardarlo
junto a mi soledad, que ella lo cuidará, que yo
pertenezco a la nada y hacia ella camino
,
hacia ella rompe, la embravecida mar
de mi alma, la roca mortal de mi cuerpo
.

A. Carmona

jueves, 22 de marzo de 2012

XXXIX

Gira el mundo alrededor del Sol
como giro yo sobre la vida,
también como la Tierra fúlgida
giro yo sobre mi como un guiñol


Las estrellas que iluminan el teatro
del universo, observan silenciosas
mis puestas de escenas fastuosas,
en el papel de doncella ya van cuatro

Sin embargo ninguna de ellas se quedó
para ver la gran representación,
puede que sea culpa del principal actor

Pues soy yo, probablemente quien sedó
sus sentimientos con mi estúpida actuación,
quien pudiese de la vida ser director
.

A. Carmona

miércoles, 14 de marzo de 2012

XXXVIII

Tus curvas paralelas
dibujan un paisaje
simétrico casi perfecto,
mis ojos te recorren
con el ansia que quisieran
mis manos y mi boca,
siento el latir acelerado
de mi corazón que desea
formar parte de tu cuerpo,
sin embargo quiero
impregnarme de tu esencia
y tengo curiosidad
de saber que te inquieta,
de conocer tus pensamientos,
pero sin hablarnos, tan sólo
dímelo con una mirada.

A. Carmona

lunes, 5 de marzo de 2012

XXXVII

Quizá sea la persona más triste
que conozco, pero jamás verás
una lágrima recorrer mi mejilla
pues a la vez poseo un corazón
duro y templado;
Quizá merezca no sentirme
totalmente feliz en la vida,
probablemente mi objetivo
sea otro, o no;
Quizá no estoy hecho para amar
a otra persona y regalarle
todo lo que soy, sin embargo
siempre ofrezco mi sonrisa
como presente;
Quizá tampoco destaque entre
los comunes, pues no soy docto,
si bien tengo ciertas dotes,
las desperdicio pues abuso
de la procrastinación y dejo
morir mi intelecto y
caigo en la locura;
Quizá mi problema para dormir
y soñar con otros mundos, sea
precisamente yo mismo,
el miedo de enfrentarme
a quien soy y afrontar mi destino
que espera latente;
Quizá mi alma se apaga cada día,
lentamente, como la vela del penitente
que caminando va derramando
la cera de mi esperanza en la calle
para ser pisada;
Son tantos quizás los que jalonan
mi vida que ya no presto atención
a lo que antes sabía certero...

A. Carmona

viernes, 2 de marzo de 2012

XXXVI

Azules iris donde el mar refleja
las estrellas queriendo ser cielo
en tus iris de hielo,
iris ámbar de dulce miel
que en atardeceres enamoras
al amante infiel,
verdes iris como la hierba fresca
naturaleza creciente en envidia
del gozo de otros ojos
y estos iris grises que de tristeza
se ven inundados sean consolados
en sus días nublados...
pero son esos iris marrones
los que llaman mi atención
sus pupilas llevan a fuego
mi nombre grabado y no puedo
dejar de mirarlos.

A. Carmona

XXXV

Renace de nuevo una primavera
que florece en la luna llena
que invoca ecos y retazos
de primaveras pasadas
y pasiones desbordadas,
trae esta no sólo luz y alegría
sino saetas y elegías llevadas
sobre hombros de cuarzo,
llega y trae nuevas esperanzas
que orbitan alrededor
del guerrero mes de Marzo.

A. Carmona