En este mes la primavera
abre la tierra, las flores
y el cielo, con sus nubes
de espuma de Afrodita;
perfumado aire de azahar
inalterable como el diamante
delicado como la margarita,
que se deshoja en sus días
como lo hizo el dramaturgo
Shakespeare y el aguerrido
Príncipe de los ingenios Cervantes,
que tornaron al añil cielo de abril.
A. Carmona
abre la tierra, las flores
y el cielo, con sus nubes
de espuma de Afrodita;
perfumado aire de azahar
inalterable como el diamante
delicado como la margarita,
que se deshoja en sus días
como lo hizo el dramaturgo
Shakespeare y el aguerrido
Príncipe de los ingenios Cervantes,
que tornaron al añil cielo de abril.
A. Carmona
Que la primavera nos pille dispuestos a empaparnos de ella siempre.
ResponderEliminarBesos