viernes, 22 de junio de 2012

LIII

Mi pluma triste y sola, que sobre la mesa quedó
guarda para si versos que con cariño atesora,
el trazo grácil del poeta sobre el papel se demora,
pues aquesta hora su mollera espesas las palabras no recitan,
pues las vendió por almoneda de vuestras caricias con solera
y vuestros dulces besos que mi amor necesitan...
Pobre pluma mía, te quedaste tan triste y sola...

A. Carmona

No hay comentarios:

Publicar un comentario